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7 abril, 2016

Challenge International du Vin

40 Aniversario del prestigioso concurso de vinos, cuyo origen se remonta a 1976, el más antiguo de Francia, que se celebra en la población de Bourg, al norte de Burdeos.


Durante los días 1 y 2 de abril de 2016 se cataron 4.162 muestras de vinos de 37 distintos países, siendo el 47% de los vinos del concurso de fuera de Francia, principalmente de España, Portugal, Italia y Hungría, por orden de importancia en el número de muestras.

 

 

 

Su presidente David Pouyfourcat destacó en una rueda de prensa en su sede en Borg que los catadores lo componen cuatro distintos de expertos: viticultores, enólogos, distribuidores (negociants) y consumidores aficionados. Las prestigiosas medallas que otorgan y que podemos ver con su anagrama vistiendo numerosas botellas, son de oro, plata, y bronce, suponiendo este año 1.300 medallas. Y otorgan premios especiales a los vinos Bio, y a los de las cercanas regiones de Blaye y Bourg.

 

Los vinos se catan a ciegas envueltos en una funda negra para evitar su identificación, por 704 catadores procedentes de 21 países, y se clasifican en tintos, blancos, rosados, espumosos, dulces y aguardientes de vino. Los organizadores han creado una interesante copa de cata, que es excelente para encontrar virtudes en los vinos sin obviar sus defectos.

 

 

Este año el país invitado de honor es Croacia. Ivica Kovacevic, el presidente de los vinos croatas de Dalmacia, junto a Ante Bacic, negociante croata de vinos de Croacia en Burdeos, nos comentaron las grandes cifras de sus vinos: son el número 21 del ranking mundial, con 33.000 hectáreas de viñedo, y una producción media anual de 1,5 millones de hectolitros, del que dos tercios son vinos blancos.

 

Exportan el 30% de su producción anual, principalmente a países de la Unión Europea. Predominan los vinos monovarietales, de sus más de 60 variedades de vid autóctona, como la famosa precursora de la cepa Zinfandel californiana. En la cata de los mejores vinos del concurso procedentes de Croacia destacaron los blancos, de gran afrutamiento y marcada personalidad, mientras los tintos resultaron más sencillos y tánicos.

 

Culmina este viaje de prensa en la Citadelle de Borg, hermosa mansión con vistas al río Dordoña, al novedoso Marché International du Vin, donde el público en general pudo degustar vinos de numerosos bodegas de Francia, así como algunas de Croacia, España y una japonesa. En esta feria se podían adquirir botellas de todos los vinos en degustación.  Felicitamos a los organizadores de este concurso de vinos en su 40 Aniversario, concurso que se ha convertido en todo “un revelador de talento”.   



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